20111026

Juez, jurado y verdugo

Que sea tu mismo
el que te juzgue
por tu peinado
y tus falsas sonrisas

Con deslumbrante camisa rosa
y pesados botines negros
intenta no reírte
en tu propia cara.

¡Elija un idioma Señor!
Y aténgase a él
que nadie entiende.
Ninguno sabe o le importa.

Que se demoren los vicios,
se atrasen los papeles.
Porque detrás de cada verdad
hay siempre raciocinio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario